Si hay algo que nos está dejando esta DANA es una solidaridad inaudita y emocionante. Ejemplo de ello es Lucas, un voluntario malagueño que se ha trasladado a Valencia junto a más compañeros. «Cuando vimos las imágenes, mis compañeros y yo decidimos coger nuestro coche, el material que teníamos y tirar para arriba», ha afirmado en el programa de esta casa Llegó la Hora.
«No había tiempo que perder, ya que veíamos que las autoridades no hacían absolutamente nada al respecto», ha explicado el malagueño, visiblemente emocionado al hablar de su experiencia.
Asimismo, ha sido claro con la diferencia entre lo que se ve en redes sociales y medios y la realidad que se vive en Valencia: «Una zona de guerra, completamente. La realidad allí es mucho peor que en redes sociales, porque es que no se puede mostrar completamente destruida calle por calle. [..,] Campo, fincas y muchísimos desaparecidos, y los garajes inundados».
El voluntario ha añadido que el paso de los días han mermado al estado psicológico de las fuerzas de seguridad y emergencias. «La UME está psicológicamente destruida», ha sentenciado, ya que «no tienen medios suficientes allí y no les dejan llevar más».
Por supuesto, el malagueño no ha dudado en seguir cargando su vehículo para volver a ir a Valencia. Este martes tiene previsto emprender su vuelta, y es que «no hay tiempo para descansar». Ha insistido en que es necesaria la ayuda ya que «hay gente todavía en los garajes que ha salido viva tras cinco días».
Además, ha destacado la importancia de que acuda personal cualificado, como sanitarios, militares, conductores profesionales, y más gente joven, que a pesar de ser muchos, ha comentado, «no son suficientes».
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