Estos benditos 18 días (sin contar los costes humanos y materiales de las borrascas) han traído a la Costa del Sol el agua que tanta falta hacía. Los pantanos se sitúan por encima ya del 50%, una máxima absoluta en los últimos años donde la sequía ahogaba (y nunca mejor dicho) a sus ciudadanos. Han sido tres semanas donde ha habido precipitaciones continuas, sin pausas, pero esta vez, se afrontan siete días donde el sol será el principal protagonista.
El embalse de la Viñuela, el que más reservas tiene de la provincia de Málaga
Al menos, así lo detalla la AEMET en su última actualización, donde tan sólo el próximo martes (de 12.00-18.00 horas) podría esperarse alguna precipitación. Bien es cierto que, pese al buen tiempo, seguirá sin llegar esas temperaturas cálida a las que se ha ido acostumbrando el malagueño en los últimos años, con máximas que no superan los 20 grados, al menos, en este inicio de semana.
Los más cofrades esperan lo mismo para la Semana Mayor, aunque aún es pronto para predecir lo que puede ocurrir en ella. El pasado año, las precipitaciones se concentraron en esos siete días, pudiendo disfrutar de la mitad de cofradías en las calles. Eso sí, la necesidad imperiosa que existía en 2024 hizo que el mal fuese menor, algo que no ocurre en este histórico 2025.
El embalse de la Viñuela, de ‘moribundo’ a ‘sobrado’
Más que un embalse, el de la Viñuela era más un descampado que otra cosa, llegando a situarse por debajo el 7% de su capacidad. Sin embargo, con 71,62 hectómetros cúbicos de volumen, es el que más reservas tiene de la provincia de Málaga, aunque eso sí, su capacidad total es de 164,37 hectómetros cúbicos, según los datos manejados por Hidrosur. Hace un año, se encontraba prácticamente vacío, con 16,39 hectómetros cúbicos.
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