La preocupación por el estado de salud del obispo de Málaga continúa. «Elevamos nuestras oraciones a nuestros Sagrados Titulares, pidiendo por la pronta y completo recuperación de nuestro Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo D. Jesús Catalá», publicó anoche en X (antes Twitter) la cofradía Dolores del Puente.
A la publicación de Dolores del Puente se sumó, entre otras, la Hermandad de Crucifixión- «Nos unimos en oración, elevando nuestras súplicas al Señor y la Stma. Virgen por la pronta recuperación de Rvdo. P. D. Jesús Catalá Ibáñez, obispo de Málaga. Que el Señor le conceda fortaleza y consuelo, y que nuestra Madre del Cielo lo cubra con su manto de amor y protección», señalaron.
El obispo de Málaga, Jesús Catalá, se encuentra ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Vithas Málaga (Parque San Antonio)con pronóstico reservado al padecer una infección después de tres operaciones de vejiga y próstata durante la última semana. Tal y como ha adelantado ‘Sur’, se encuentra estabilizado, pero en estado «muy grave».
«El obispo de Málaga, D. Jesús Catalá Ibáñez, fue intervenido en la mañana del martes 22 de abril de un pólipo en la vejiga. La operación programada fue satisfactoria transmitiendo el prelado su agradecimiento por las muestras de cercanía, oración y afecto fraterno que le hicieron llegar con motivo de su operación», aseguró el Obispado a través de un comunicado oficial.
El Código de Derecho Canónico establece la posibilidad de declarar «sede impedida» cuando por «incapacidad» el obispo esté «totalmente imposibilitado para ejercer su función pastoral en la diócesis». Cuando una sede está impedida y no hay un obispo auxiliar, como en Málaga, el gobierno de la diócesis corresponde al vicario general -Antonio Coronado- o a otro sacerdote. Desde el Obispado, eso sí, tratan de transmitir normalidad.
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