«Del ascenso directo tenemos que olvidarnos», se ha resignado Fran Escribá, visiblemente tocado, tras la derrota del Granada en La Rosaleda. El entrenador rojiblanco ha afirmado que «sería ridículo» seguir pensando en la posibilidad de regresar por la vía rápida tras cerrar frente al Málaga «un día para no estar contento». «La primera parte es terrible. Creo que es la peor desde que estoy yo aquí», ha sostenido el técnico rojiblanco, quien ha puntualizado que sus pupilos perdieron «todos los duelos individuales, tanto en defensa como en ataque, y esa ha sido una de las claves del partido».
«La primera parte tan mala que hicimos, con un penalti absurdo, te condiciona todo el encuentro», ha analizado el preparador valenciano, quien ha reconocido que le «apetecía cambiar muchas cosas, pero siempre dices ‘vamos a esperar al descanso’». «Cambiamos a dos delanteros. Eran los mismos jugadores prácticamente de inicio, pero es cierto que el equipo no se pareció en nada al de otras semanas. Mejoramos algo, porque era imposible no mejorar en la segunda parte. Por lo menos, tuvimos algo más de presencia», ha abundado. A su modo de ver, «la culpa es de todos, empezando lógicamente por el entrenador», ha afirmado, antes de poner en foco en que «el equipo fuera no está dando el nivel que está dando en casa». «Es un problema que llevamos bastante tiempo arrastrando . Fuera ha dado la sensación de que ha faltado esa chispa. Nosotros no lo hemos transmitido», ha profundizado.
Cuestionado, precisamente, sobre los movimientos con los que ha buscado la reacción, Escribá ha explicado que se decantó por alinear a tres centrocampistas para «tener control». «Metimos dos delanteros para al menos, que tuviéramos presencia en área», ha aclarado. «No estábamos llegando, era una batalla perdida», ha insistido. «No hemos tenido apenas centros laterales porque no hemos ganado esos duelos. Uno piensa el recorrido que tiene Rubén la semana pasada y que hoy ha sacado solo un centro. Seguimos sin poder generar situaciones de gol. Ellos defendieron bien y nosotros llegamos poco. En la segunda, con más o menos peligro, por lo menos, estuvimos en área más veces», ha escrutado.
A este respecto, también ha sido preguntado por la entrada de Manu Trigueros y su no participación desde el comienzo. «Ha entrado en una situación en la que nosotros íbamos a dominar más el centro del campo», ha resuelto, tras lo que ha admitido que, con él, los rojiblancos han «mejorado algo el juego», si bien no considera «que haya sido determinante». «Manu juega cuando uno piensa que el partido le va», ha sentenciado.
«Quedan puntos de sobra»
«No hemos perdido el derecho a depender de nosotros mismos», ha hecho hincapié Escribá, a pesar de que el Almería puede dejar al Granada fuera de la promoción este domingo. «Quedan 12 puntos, de sobra para que, si los sumamos, estemos de nuevo ahí. Eso todavía no lo hemos perdido. Es imposible que, con lo spuntos que se pueden conseguir ahora mismo, no estemos dentro. Es un paso atrás, una jornada menos, y un cabreo importante que llevamos hoy», ha matizado, para añadir inmediatamente después que «con 71 puntos estás en promoción, y con menos». «Este equipo fue campeón en su momento con algo así. Algunos tienen margen de error y nosotros, con cuatro partidos, ya no tenemos», ha zanjado.
«Nos sabe muy mal. Siempre decimos lo mismo los entrenadores. Les pedimos disculpas a los aficionados. Nos han venido siguiendo y apoyando todo el año. Hay que pedirles disculpas y sentir el partido tan malo que hemos hecho, sobre todo en la primera parte, que no es lógica en un equipo de este nivel», ha lamentado. «Nos ha faltado mucha creación ¿Por qué? No lo sé. La semana pasada, con el mismo sistema, generamos trece o catorce ocasiones de gol. Luego la sensación es que hubo algo más de presencia, pero no lo suficiente para haber empatado», ha concluido.