El Real Betis Féminas se jugaba la vida en el partido de este pasado domingo frente al FC Barcelona. Un encuentro que tenía un gran aliciente por parte de los equipos. Las verdiblancas podrían descender en caso de derrota y de otros resultados, mientras que las culés podían certificar su campeonato liguero.
El partido terminó con derrota local. Un resultado muy abultado, ya que fueron en total nueve goles las que anotaron las catalanas, mientras que las sevillanas, se fueron de vacío. Un partido en el que las béticas se vieron con una futbolista menos desde el minuto 27. La guardameta Paula Vizoso fue expulsada por una falta cuando era la última jugadora. En el partido las verdiblancas no tuvieron opciones reales de vencer, ya que el vendaval azulgrana está a otro nivel.
Una jornada que empezó con caos, ya que en una jornada que pretendía ser unificada, no empezó siéndolo. Un incidente en la grada del Athletic-Espanyol obligó a la ambulancia a abandonar Lezama, sin la cual no puede empezar el encuentro. Por lo tanto, se decretó que los partidos se iban a retrasar quince minutos.
Sin embargo, este mensaje no llegó a tiempo a Coruña y a Sevilla y el Deportivo-Sevilla y el Betis-Barcelona empezaron a la hora inicial. Esto provocó que desde la propia liga tomaran una medida: el descanso de estos dos partidos pasaría a ser de media hora, en lugar de quince minutos. De esta forma se igualaron las horas de todos los partidos.
Con este descenso, Betis Féminas abandona la élite del fútbol femenino tras nueve años consecutivos. Habrá que ver cuanto les cuesta ahora a las de Juan Rojo, ya que nunca es fácil hacerlo de forma rápida, regresar a la categoría reina del fútbol femenino en España.
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