El alcalde de Córdoba, José María Bellido, y la subdelegada del Gobierno central en la provincia, Ana López, han visitado este lunes la comisaría conjunta en el recinto ferial de El Arenal para hacer balance de la Feria de Nuestra Señora de la Salud, que ha comenzado el viernes por la noche y hasta el momento ha registrado cinco detenciones, dos de ellos por tráfico de drogas y el resto por lesiones, malos tratos en el ámbito familiar y una reclamación judicial.
En declaraciones a los periodistas, el regidor ha valorado que «está siendo una feria que afortunadamente hasta ahora ocurre dentro de la normalidad, con las incidencias habituales», pero «hasta ahora todas son de carácter leve», de manera que «no hay que lamentar ningún incidente grave», ha remarcado.
Ante ello, ha agradecido «el civismo» de quienes acuden a la feria y el dispositivo conjunto de vigilancia y seguridad, «donde trabajan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Policía Local, Policía Nacional, Policía Autonómica, Guardia Civil, Protección Civil, así como Cruz Roja».
Igualmente, Bellido ha avanzado que «todo apunta a que este año va a volver a ser una feria de récord en cuanto a asistencia de personas», después de que «los avances de datos en transportes indican que el viernes han aumentado más de un 9% respecto al año pasado en Aucorsa, que ya fue el año de récord, y el sábado exactamente igual, un aumento del 5% respecto a 2024», ha valorado, subrayando el hecho de que sea «una feria de récord de asistencia que se esté desarrollando con absoluta normalidad».
Mientras, la subdelegada ha detallado que además de las detenciones, ha habido 156 identificados y más de 50 actuaciones, «pero todo dentro de la normalidad», a la vez que la Guardia Civil lleva los controles de alcohol y drogas en carreteras durante toda la semana, y ha pedido a quienes visiten la Feria «prudencia y responsabilidad al pasarlo bien».
Preguntado por la atracción en la que este domingo un niño de siete años ha resultado herido leve al salir despedido, el alcalde ha explicado que «se comprobó por parte de los servicios técnicos de la ingeniería la atracción y estaba todo correcto, con lo cual se volvió a abrir». «Todo parece indicar, que supongo que se investigará con más profundidad, que el problema no era de funcionamiento de la atracción, sino o de control de acceso o del aseguramiento en el momento en que se puso en marcha, que fue lo que provocó el accidente», ha indicado.
No obstante, ha recordado que «la atracción se clausuró, se revisó por parte de los estudios de ingeniería, estaba funcionando correctamente y por tanto se le dio permiso para que pudiera reabrir». Bellido espera que «no vuelvan a reproducirse accidentes de este tipo».