Las bases reguladoras para la concesión del uso del Nuevo Los Cármenes por cuatro años, aprobadas por el Consejo de Administración de Gegsa este martes, fijan una serie de requisitos para poder concurrir al concurso público que se abrirá una vez se publiquen los pliegos. Todo se encamina a que sea el Granada quien se presente y resulte beneficiario del procedimiento, si bien en el mismo puede participar cualquier entidad que reúna las condiciones determinadas, entre las que se incluyen la finalidad deportiva de su existencia, su contribución a la ciudad con su actividad y, sobre todo, un plan de inversión a ejecutar hacia la mitad de la duración del contrato.
En primer lugar, dichas bases determinan que al concurso se podrá presentar cualquier entidad deportiva, siempre y cuando tenga equipos masculinos y femeninos que compitan en el fútbol profesional. Es el caso del Granada, cuya primera plantilla masculina trata de regresar a Primera División mientras que su sección femenina ya aseguró su presencia en la máxima categoría la próxima campaña, si bien el procedimiento está abierto a cualquier otra institución que se encuentre en estas circunstancias. Por otro lado, para poder concurrir será necesario adjuntar un proyecto deportivo, un proyecto de impacto en la ciudad y, sobre todo, un plan de inversiones en la instalación que comprenda una intervención en su mejora y modernización.
Este último es el punto clave de las nuevas bases, que orienta los pliegos hacia un lavado de cara a Los Cármenes que se completa con el cierre de las esquinas, proyecto ya puesto en marcha por el Ayuntamiento de Granada, y la reforma estructural del recinto, obra que asume la Diputación. La intención es que el club beneficiario del concurso asuma el resto de la actuación, que comprendería la modernización del recinto y la ampliación de su aforo, presumiblemente mediante la rebaja del nivel del césped. Todo ello debería ser ejecutado en dos años, según fijan las condiciones del procedimiento. Una comisión constituida específicamente para tal fin evaluará todas las propuestas, con especial atención al plan de inversión que se presente, su viabilidad y su impacto.
Beneficios en la ciudad
Todo ello tiene como objetivo que la concesión del uso de Los Cármenes repercuta en la ciudad, más allá de las implicaciones deportivas. Por ello, las bases también determinan que la actividad habitual en el estadio deberá ser compatible con otros eventos que Gegsa, el Ayuntamiento de Granada u otros organismos organicen en la instalación. Esto son posibiles conciertos u otros de cualquier índole, como actividades culturales.
Además, la entidad que resulte autorizada para el uso del estadio durante cuatro años deberá asumir todos los gastos que genere y su mantenimiento. Esto son partidas de luz, agua, legionela, combustibles, teléfono y fitosanitarios, entre otras, así como de la conservación ordinaria de sus elementos y los derivados de la seguridad del recinto fuera de los días de partido, tales como la alarma. El club beneficiario también se hará cargo de las reparaciones y reposiciones motivadas por la celebración de eventos deportivos, principalmente partidos de fútbol, y el cuidado del césped. A todo ello se unirá la obligación de contratar un seguro de responsabilidad civil y otro integral de daños, robo, actos vandálicos y fenómenos atmosféricos. Del mismo modo, tendrá que presentar un código de buen gobierno, en el que establecerá los principios éticos que rigen la actividad de la institución, así como la integridad, la transparencia, la responsabilidad y el respeto a la legalidad, junto con un protocolo integral de lucha contra la violencia, el racismo, la xenofobia, la intolerancia y los discursos de odio.
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