«Dimisión, dimisión». Esa ha sido la banda sonora en el Pleno del Congreso en su primera sesión de control tras la renuncia de Santos Cerdán al verse implicado en la presunta trama de comisiones de Koldo García y José Luis Ábalos. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que comparecerá dentro de tres semanas, ha sido objeto de estos gritos en el hemiciclo.
Ha sido un tenso cara a cara entre Sánchez y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. «Ábalos es el principio, pero Cerdán no es el final», ha avisado Fejóo entre gritos de «dimisión, dimisión» y llamadas de atención de la presidenta de la Cámara, Francina Armengol.
En su respuesta al ‘popular’, cuando Sánchez estaba enumerando los casos de presunta corrupción que salpican a gobiernos autonómicos del PP, los diputados de este partido han empezado a gritar «dimisión, dimisión». Mientras, la presidenta del Congreso pedía calma y los diputados de la bancada socialista se ponían en pie para aplaudir a su líder una vez ha terminado su intervención.
«Ha venido a decir ‘no dimito porque España necesita mis políticas progresistas, pero no convoco elecciones porque las pierdo'», le ha reprochado Feijóo a Sánchez. El presidente del PP ha aseverado que «la única carta que esperan es la carta de dimisión». Esto después de la carta de ayer de Sánchez a la militancia socialista.
«La Gürtel del PSOE»
«Jure y perjure que no estamos ante la Gürtel del PSOE, que no va a aparecer P. Sánchez en ningún papel», le ha recriminado el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, al presidente del Gobierno. «La izquierda no puede robar, esta gente sí», ha sentenciado señalando a la bancada de la derecha.
Sánchez le ha respondido que «estamos hablando de un informe de la UCO, no hay sentencia firme». «El PSOE ha sufrido un duro golpe. No generalice, no hay indicios que apunten a financiación irregular del PSOE», ha añadido.
Además, Sánchez ha considerado que el caso de Santos Cerdán es «la anécdota, no la categoría» y ha subrayado que no es la Gürtel del PSOE.
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha pedido al presidente del Gobierno «dar garantías» de tener la situación bajo control en el PSOE tras la presunta implicación del exministro Ábalos y el exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, en una trama de corrupción.
Abascal abandona el hemiciclo
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha abandonado el hemiciclo del Congreso sin escuchar la respuesta de Pedro Sánchez a su pregunta. La intervención de Abascal ha sido la más dura, en la que ha llamado al presidente «indecente, corrupto y traidor». «Sus socios le van a apoyar porque les ha indultado. Usted se sienta en el banco azul por un acuerdo entre clanes corruptos», ha aseverado.
Por su parte, Sánchez ha contestado al «ausente» Abascal y ha lamentado que «la ultraderecha trae odio, falta de convivencia y falta de respeto a las instituciones». También ha defendido que en los siete años de Gobierno socialista «no ha habido ninguna sentencia de corrupción» contra el Ejecutivo.
Quien también se ha borrado ante la asistencia de Sánchez al Congreso como gesto de protesta con el PSOE es la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz. Una ausencia que en el espacio se vincula con un gesto de escenificar distancia con el PSOE y de protesta por su reacción ante esta crisis.
Más noticias de 101TV en las redes sociales: Instagram, Facebook, Tik Tok o X. Puedes ponerte en contacto con nosotros en el correo informativos@101tv.es