El Andorra es de nuevo equipo de Segunda División. Tan solo un año después de certificar su descenso, el equipo de Gerard Piqué regresa a la categoría de plata. Se impuso a la Ponferradina en El Toralín, gracias a un solitario gol de Lautaro De León al filo de la hora de partido. Suficiente para hacer bueno el empate que cosechó en la ida, en su estadio, e imponerse en la final del ‘playoff’ de ascenso.
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Ni jugar en cancha contraria ni que las gradas estuvieran abarrotadas, ni siquiera que la eliminatoria la abriera Borja Valle en el duelo de ida. Nada resquebrajó la moral del Andorra en la eliminatoria. Manu Nieto la igualó todavía en la ida, vida extra para afrontar la visita a El Toralín. En Ponferrada, el guion fue otro. Fue el Andorra quien se adelantó pese a que la Ponferradina saltó mejor de inicio.
Perdonaron a lo largo del primer acto, en lo que los visitantes apenas se acercaban mediante el balón parado. Sin embargo, al comienzo del segundo acto se activó Lautaro De León. Le derribó Andrés Prieto en el área y el colegiado señaló la pena máxima. El propio delantero asumió la responsabilidad, pero el guardameta le leyó la intención y rechazó. La pelota le cayó de nuevo al punta, que, con el arquero vencido, solo tuvo que empujar a la red.
La Ponferradina apretó en busca del empate y Borja Valle logró anotar, pero el banderín señalaba al cielo. El Andorra se protegió, aun peligroso al contragolpe, y logró mantener el resultado. El cuadro pirenaico se une al Ceuta y la Cultural Leonesa, los otros dos equipos ya ascendidos de Primera RFEF. La última plaza se la jugarán este domingo la Real Sociedad B y el Nástic de Tarragona, después del triunfo del filial txuri-urdin en el partido de ida.