Si en mayo fue el sabotaje la línea argumental que lanzó el Gobierno de España para responder a la crisis ferroviaria que afectó a miles de pasajeros de trenes entre Madrid y Andalucía, en esta última crisis ferroviaria ha quedado señalada la compañía francesa Ouigo. La vicepresidenta María Jesús Montero deslizaba este miércoles que el problema de las incidencias de este pasado martes con decenas de trenes cancelados o con demoras de hasta 14 horas estaba en un tren de esta operadora de Alta Velocidad de bajo coste.
Ahora, Adif en un informe técnico incide en esta teoría de que un tren Ouigo parado en la vía es el causante de que muchas personas se quedaran paradas durante 14 horas en mitad de la nada como los más de 300 afectados de un tren Madrid-Málaga. Un corte de las comunicación que afectó a Sevilla, Málaga, Cádiz, Huelva y Granada, que sufrieron este ‘apagón’ ferroviario desde la noche del lunes hasta el mediodía del martes con todas las consecuencias económicas que conlleva una situación así.
La versión de Adif
Un tren de Ouigo que se quedó parado en las vías de tren fue el origen de una serie de incidencias que explican la interrupción en la circulación que se produjo el pasado lunes en la línea de Alta Velocidad entre Madrid y Andalucía, según el análisis realizado por Adif, el gestor público de la infraestructura ferroviaria.
En concreto, un tren del operador francés perdió la comprobación con los sistemas de señales y quedó parado en la vía, lo que provocó que hasta cuatro trenes en un tramo de siete kilómetros tuvieran que detenerse en cadena.
Durante la detención, todos los trenes afectados continuaron demandando tensión a la catenaria en puntos muy concretos para mantener el confort de los viajeros, como el funcionamiento del aire acondicionado.
Fruto de esa alta demanda, la catenaria se saturó y se rompió sobre el tren que se paró detrás del Ouigo, que era un Avant de Renfe, en un tramo de vía entre Los Yeles y La Sagra, en la provincia de Toledo.
Por tanto, el tren de Ouigo es el origen de la incidencia, ya que su parada obligó a detener los trenes que venían por detrás, pero no es el culpable en sí, ya que la razón que ocasionó todos los problemas fue la acumulación de tantos trenes parados en un mismo tramo, demandando electricidad.
Por ello, Adif ya ha anunciado que acometerá una actuación de urgencia en el plazo de una semana para cambiar la ubicación de varios elementos de la catenaria considerados «altamente sensibles» en esa zona de La Sagra y minimizar, así, el riesgo de incidencias por falta de tensión derivadas de problemas en la catenaria, especialmente en el corredor Sur de Alta Velocidad.
Las palabras de Montero
Este análisis de Adif corrobora en parte la versión que la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, dio este miércoles en una charla informal que las cámaras captaron con motivo de una reunión entre PSOE y Sumar.
«Las máquinas de Ouigo tienen dificultades, se paran fácilmente y te provoca un retraso en toda la cadena. Tiene unos servicios de mantenimiento que nosotros desde Renfe se los aportamos. No retiran los trenes de las vías o tardan en retirar un tren de las vías y afecta a toda la cadena», dijo Montero.
Ouigo lo desmiente
Ante las acusaciones de Montero, Ouigo comunicó ayer que que sus trenes no provocaron la incidencia, ya que realmente su tren no es responsable directo de la caída de la catenaria, pero sí de que se parasen otros trenes detrás.
La compañía francesa de trenes ‘low-cost’ el operador francés también desmintió a la ministra en lo que concierne al mantenimiento de los trenes, puesto que consideran que ese caso ese servicio lo presta la propia empresa y no Renfe, como decía Montero.