Las aventuras de los jabalíes por la provincia de Granada continúan también en verano. Y no parecen tener hábitos muy distintos de los ciudadanos. Si los granadinos se van a la costa con el calor, estos animales, que se mueven por donde hay comida, no iban a ser menos.
Dos jabalíes vuelven a sorprender por la zona de Bola de Oro y el Serrallo
El último capítulo de las andanzas de estos mamíferos tuvo lugar durante la pasada madrugada y sorprendió a unos jóvenes que se divertían junto a la costa granadina. En concreto, en Playa Granada, donde cuatro jóvenes miembros de una familia de jabalíes campaban a sus anchas cerca de una zanja en la que se están realizando unas obras. Claro, a quién no le va a apetecer un paseo nocturno en verano, con la fresca brisa del mar.
Lo cierto es que no es una imagen nueva. Los vecinos de Playa Granada empiezan ya a acostumbrarse este verano a la presencia de estos animales por los alrededores. En las últimas semanas, se han dejado ver en varias ocasiones, tanto a la luz del día como en la oscuridad de la noche, para sorpresas de los transeúntes y bañistas que se los encontraron.
Otras zonas
En otros puntos de la provincia también es ya habitual toparse con estos animales. En la capital, a veces pasean solo un par de ellos y otras, en cambio, es una piara entera, pero empiezan a convertirse en unos vecinos más. La estampa es bastante frecuente en la zona de Bola de Oro, sobre todo al caer la primavera, cuando los jabalíes de las zonas aledañas salen de su hábitat natural para adentrarse en el asfalto de la ciudad. Los entornos del Serrallo, los Rebites e, incluso, el barrio del Zaidín y sus alrededores son un espacio habitual de avistamiento de estos mamíferos.
Varios jabalíes pasean a sus anchas por la zona del Serrallo en Granada
Los agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía se ven obligados a actuar con cierta asiduidad en el entorno para garantizar la seguridad de los animales en estos meses. Además, la Policía Local advierte con frecuencia de su presencia y recomienda que no se depositen bolsas con restos de comida fuera de los contendores de basura, ya que pueden verse atraídos.