Una de las pocas malas noticias del partido entre Málaga y Betis de este sábado es la lesión de Isco. El malagueño, ídolo en la Costa del Sol, se marchó en muletas de La Rosaleda por una acción en la que Larrubia le da una patada cuando intentaba robar el balón y que le obligó a ser sustituido. Según las informaciones que llegan desde Sevilla, las pruebas médicas realizadas al de Arroyo de la Miel estiman unos tres meses de baja.
Sería una ausencia muy destacada en las filas del Betis, que perderían para el inicio de liga a una de sus estrellas. La acción, que tuvo lugar en los últimos minutos de la primera parte, fue «fortuita» según apunta Larrubia, autor de la falta. El jugador del Málaga se vio afectado tras el suceso y ha tenido que salir a pedir disculpas públicamente tras un aluvión de insultos por parte de la afición verdiblanca: «Todo el que me conozca sabe que jamás iría a lesionar, ni si quiera a hacer daño a un compañero de profesión y mucho menos al que ha sido y es un ídolo para mí», publicaba en sus redes sociales el del barrio de La Luz.
Isco se marcha en muletas del Estadio de La Rosaleda tras el pisotón de Larrubia
Tal y como informa el Betis, el jugador sufre «una nueva fractura sin desplazamiento en el tercio medio de su peroné izquierdo» en el mismo pie del que le operaron el curso pasado. «Se trata de una nueva lesión traumática que no tiene relación con el proceso previo, el cual quedó resuelto. El jugador se someterá a un tratamiento conservador en las próximas semanas y su reincorporación dependerá de la evolución del proceso», añadía el club bético.