La Guardia Civil ha detenido a un vecino de La Rambla, de 34 años, como presunto autor de tentativa de homicidio y daños valorados en más de 20.000 euros. El hombre roció con gasolina un semirremolque que albergaba los aseos portátiles del recinto ferial de esta localidad cordobesa y le prendió fuego sabiendo que en su interior se encontraba un trabajador de la empresa de seguridad.
El detenido, que ha ingresado en prisión por orden judicial, protagonizó el suceso en la madrugada del 12 de agosto tras haber mantenido dos altercados previos con el vigilante que controlaba el acceso a las instalaciones sanitarias.
La rápida actuación evitó una tragedia
La intervención inmediata de los agentes de la Guardia Civil y la Policía Local fue clave para evitar una desgracia mayor. Los efectivos lograron sofocar las llamas utilizando extintores, mientras que posteriormente los Bomberos completaron las labores de extinción.
El trabajador que se encontraba en el interior del semirremolque no se había percatado inicialmente de lo que ocurría en el exterior. Los agentes consiguieron alertarle golpeando insistentemente la persiana metálica de acceso hasta que pudo abandonar la instalación sano y salvo.
Durante la inspección posterior del lugar de los hechos, los investigadores encontraron restos de una garrafa que desprendía un fuerte olor a gasolina, evidencia que resultó crucial para esclarecer lo sucedido.
Una venganza tras dos altercados consecutivos
La investigación desarrollada por la Benemérita ha reconstruido los hechos que llevaron a este grave incidente. Todo comenzó la noche del 10 de agosto, cuando el ahora detenido mantuvo un altercado de orden público con el trabajador encargado de controlar el acceso a los aseos portátiles instalados por el Ayuntamiento en el recinto ferial.
Al día siguiente, el 11 de agosto, el mismo hombre volvió a protagonizar un incidente con el vigilante, quien procedió a expulsarle nuevamente de las instalaciones. Esta segunda confrontación parece haber sido el desencadenante de la venganza que planificó el presunto agresor.
Horas después de ser expulsado por segunda vez, el vecino de La Rambla se dirigió a una gasolinera de la localidad portando una garrafa, que llenó de combustible. Con este material inflamable regresó al recinto ferial, donde roció el semirremolque que servía como base para los aseos portátiles y le prendió fuego.
Tentativa de homicidio con pleno conocimiento
Lo más grave del caso es que, según ha determinado la investigación, el agresor era plenamente consciente de que el trabajador se encontraba en el interior del semirremolque cuando decidió provocar el incendio. Esta circunstancia convierte los hechos en una tentativa de homicidio, ya que puso en riesgo directo la vida de la víctima.
El semirremolque funcionaba como una instalación temporal que albergaba los aseos portátiles y servía como punto de control para el vigilante de la empresa contratada por el Ayuntamiento para la custodia de estas instalaciones durante las fiestas locales.
Daños valorados en 20.000 euros
Además del grave riesgo para la integridad física del trabajador, el incendio provocó importantes daños materiales. La empresa propietaria del semirremolque ha realizado un peritaje completo de los desperfectos ocasionados por el fuego, que ascienden a 20.000 euros.
Esta cifra incluye tanto los daños estructurales del vehículo como los desperfectos en el equipamiento y las instalaciones que contenía. La valoración económica ha sido fundamental para determinar el segundo delito por el que se imputan los hechos al detenido.
Prisión provisional tras la investigación
La minuciosa investigación llevada a cabo por los agentes permitió reunir suficientes indicios para identificar al presunto autor de los hechos. Las pesquisas incluyeron el análisis de las evidencias encontradas en el lugar, testimonios de testigos y la reconstrucción de los movimientos del sospechoso durante las horas previas al incendio.
Una vez completadas las diligencias, el hombre fue detenido y puesto a disposición judicial. El juzgado correspondiente, tras valorar la gravedad de los hechos y el riesgo que supone para la seguridad ciudadana, ha acordado su ingreso en prisión provisional.
Este caso pone de manifiesto cómo una discusión aparentemente menor puede escalar hasta convertirse en un intento de homicidio, recordando la importancia de la mediación en conflictos y la necesidad de buscar soluciones pacíficas a las disputas cotidianas. La rápida actuación de las fuerzas de seguridad fue determinante para evitar consecuencias fatales en un suceso que podría haberse saldado con la muerte del trabajador.
Más noticias de 101TV en las redes sociales: Instagram, Facebook, Tik Tok o X. Puedes ponerte en contacto con nosotros en el correo informativos@101tv.es