Lo que parecía una incidencia puntual se ha convertido en un auténtico calvario para miles de viajeros que utilizan a diario la red de Cercanías en Málaga. Este miércoles se cumplen tres días consecutivos de suspensiones, retrasos y alteraciones en la línea C1, a raíz del descarrilamiento de un tren ocurrido el pasado lunes. La jornada de hoy ha sido, para muchos usuarios, la más caótica hasta el momento.
El incidente tuvo lugar el lunes por la mañana, cuando un convoy de la línea C1 descarriló, interrumpiendo la circulación entre varios tramos clave del trazado que une Málaga con Fuengirola. Desde entonces, los problemas se han multiplicado y los trenes no han vuelto a operar con normalidad.
Tercer día consecutivo con problemas en los trenes del Cercanías de Málaga
Durante estas 72 horas, los usuarios han tenido que enfrentarse a un panorama desolador: trenes cancelados sin previo aviso, esperas interminables en los andenes y convoyes completamente abarrotados cuando, con suerte, llegaban a pasar. El número de trenes en circulación ha sido reducido drásticamente, provocando embudos en las estaciones más transitadas y situaciones de auténtico agobio en hora punta.
Los empujones, la tensión y los nervios acumulados han sido la tónica en los pocos trenes que han conseguido circular. Viajar de pie y en silencio, con apenas espacio para moverse, se ha convertido en una rutina de supervivencia urbana.
Una normalidad que no llega
Lejos de resolverse, la situación parece haberse estancado. Aunque desde la tarde del lunes se trabaja intensamente para reparar los daños que dejó el descarrilamiento, los avances no han sido suficientes como para restablecer la normalidad. Desde el martes, algunos trenes han retomado el servicio en determinados tramos, pero bajo condiciones precarias: recorridos parciales, frecuencias reducidas y constantes demoras.
Otro día de retrasos generalizados en el Cercanías de Málaga
El miércoles se presentaba como la jornada clave para volver a la normalidad, pero los hechos han desmentido las previsiones más optimistas. La circulación continúa siendo muy limitada, con trenes que pasan cada mucho tiempo, sin una frecuencia fija ni garantías de continuidad. Muchos usuarios han optado por alternativas de transporte, saturando también autobuses y vehículos privados.
Una herida abierta en plena temporada alta
Este episodio se produce, además, en uno de los momentos de mayor afluencia en la red de Cercanías, coincidiendo con el arranque del verano, el incremento del turismo y el desplazamiento diario de estudiantes y trabajadores entre localidades costeras. La línea C1, que conecta puntos como Torremolinos, Benalmádena o Fuengirola con la capital malagueña, es especialmente vital para el transporte diario en el litoral.
A esto se suma el hecho de que no se han ofrecido alternativas de transporte suficientes durante estos días. Salvo por algunas comunicaciones informativas y recomendaciones de uso de otros medios, la respuesta institucional ha sido considerada insuficiente por muchos pasajeros afectados.
Más noticias de 101TV en las redes sociales: Instagram, Facebook, Tik Tok o X. Puedes ponerte en contacto con nosotros en el correo informativos@101tv.es