La musa de la época de oro del cine italiano, ha fallecido este martes a los 87 años en Francia. Claudia Cardinale fue considerada mito del cine mediterráneo por sus papeles en clásicos como ‘Fellini ocho y medio’, ‘El gatopardo’ o ‘Rocco y sus hermanos’, y su trabajo con cineastas de altísimo nivel como Federico Fellini o Luchino Visconti.
Ha fallecido rodeada de sus hijos en Nemours, cerca de París, donde vivió los últimos años. La muerte de Cardinale es la despedida de una de las últimas leyendas italianas de la época de los 60. «Nos deja el legado de una mujer libre e inspirada, tanto en su carrera como mujer como artista», ha dicho su agente Laurent Savry a AFP.
Actriz por casualidad
Nació en Túnez en 1938, desde pequeña no quería ser actriz, sin embargo, su vida se torció cuando el director René Vautier la descubrió en la salida del colegio. Desde ese momento, comenzó su trayectoria en el mundo del cine con películas como ‘Les anneaux d’or’ o ‘Goha, el simple’, en esta última debutó a lo grande y muy pronto se convirtió en leyenda.
En muy poco tiempo fue conocida como la más bella de Túnez. Y después de sus primeras películas, llegó a convertirse en mito histórico. ‘Circus World’ o ‘La pantera rosa’ fueron dos de los filmes que le llevaron al estrellato, Hollywood le abrió la puerta sin ella llamar y pronto se convirtió en una dama del cine de los 60.
Una activista incansable
Con un rostro magnético y versátil, conquistó la gran pantalla europea. En la última etapa de su vida abandonó parcialmente el mundo del cine y se dedicó a revindicar los derechos de las mujeres y homosexuales siendo una gran activista. Fue Embajadora de Buena Voluntad de la UNESCO para los Derechos de la Mujer desde 1999 y Caballero de la Legión de Honor francesa desde 2008.
Claudia Cardinale siempre quiso desarrollar su carrera en Europa, donde se mantuvo en activo hasta los 2000. Entre sus últimos papeles se encuentra la película ‘El artista y la modelo’ (2012), del español Fernando Trueba. En esta interpretó a la mujer de un escultor retirado en la Francia ocupada durante la Segunda Guerra Mundial.
Los hombres de su vida
La vida de la musa de Italia ha tenido momentos verdaderamente difíciles, como una violación a los 17 años. Fruto de esta, Claudia se quedó embarazada y el bebé fue bautizado como Patrizio, los padres de Cardinale lo criaron como su propio hijo.
Fue una de las mujeres más bellas, sensuales y deseadas de Italia, sin embargo, ella solo tuvo ojos para un hombre: Pasquale Squitieri. A pesar de que se casó anteriormente con Franco Cristaldi, productor con el que estuvo nueve años de su vida; Claudia vivió el verdadero amor con Pasquale con el que tuvo a su hija.
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