Un grupo de 52 personas, entre ellos más de 40 menores franceses de entre 10 y 15 años, fue desalojado este miércoles 23 de julio de un avión de Vueling en el aeropuerto de Manises tras protagonizar incidentes durante el embarque. La intervención derivó en la detención de una monitora de 21 años por resistencia a la autoridad.
Los hechos ocurrieron sobre las 14.30 horas en un vuelo con destino París. Según fuentes de la Guardia Civil, la actuación se debió a «conductas inapropiadas reiteradas» y «manipulación del material de emergencia» por parte de los menores, que provocaron tal alboroto que el piloto salió de la cabina para comprobar qué sucedía.
Israel denuncia antisemitismo mientras Guardia Civil asegura que actuó por motivos de seguridad aérea
Los agentes intervinieron tras el aviso de la tripulación, que reportó alteraciones del orden durante el embarque. Al llegar al avión, observaron a varios monitores discutiendo acaloradamente con la tripulación y mostrando actitud agresiva hacia los agentes.
La responsable del grupo llegó a empujar y arremeter contra uno de los guardias civiles, por lo que fue reducida y detenida. Se han instruido diligencias por delito contra el orden público, resistencia y desobediencia a la autoridad, además de una denuncia por alteración de la seguridad aérea.
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Reubicación
Finalmente, 23 menores y dos monitores fueron reubicados en un vuelo de otra compañía, mientras el resto pernoctó en un hotel. Los últimos seis integrantes del grupo salieron a las 13.50 horas del jueves. La versión oficial contrasta con la ofrecida por familiares y responsables del campamento de verano Kinneret, organizador del viaje. Denuncian una reacción desproporcionada motivada por prejuicios antisemitas, ya que los jóvenes son de confesión judía.
El ministro israelí para la Diáspora, Amichi Chikli, calificó el suceso como «uno de los incidentes antisemitas más graves recientes» y denunció que la directora fue «arrestada y golpeada». Según su versión, los jóvenes cantaban canciones en hebreo cuando la tripulación respondió que «Israel es un estado terrorista».
Testimonios
Karine, madre de uno de los niños, declaró al canal israelí i24NEWS que «solo uno empezó a cantar y tras una advertencia se calmó la situación». Asegura que los agentes pidieron al grupo desembarcar y dejar sus móviles en el suelo para borrar los vídeos, momento en que la monitora se negó y fue detenida.
Según Vueling, los adolescentes «interrumpieron la demostración obligatoria de seguridad»
La aerolínea rechaza categóricamente las acusaciones: «Negamos rotundamente cualquier afirmación que relacione la decisión de nuestra tripulación con la expresión religiosa de los pasajeros, la cual respetamos absolutamente». Según Vueling, los adolescentes «interrumpieron la demostración obligatoria de seguridad», manipularon equipos de emergencia y desoyeron múltiples advertencias. En la terminal, el comportamiento conflictivo continuó y «algunos individuos mostraron actitud violenta frente a las autoridades».
Comunicado israelí
El Gobierno de Israel emitió un comunicado a las 13.28 horas confirmando que «una parte significativa del grupo ya llegó a su destino y el resto tomó un vuelo adicional». Aseguró que continuará «brindando asistencia a israelíes y judíos en dificultades en cualquier lugar del mundo», aunque no mencionó indicios de antisemitismo.
Fuentes de la Guardia Civil confirman que en ningún momento de la actuación los agentes conocían la confesión religiosa de las personas desembarcadas. Recalcan que la intervención se realizó exclusivamente por motivos de seguridad aérea tras el aviso de la tripulación.