La criminalidad tradicional en la provincia de Sevilla ha experimentado un descenso del 6,6% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según refleja el último Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior, que abarca los meses de enero a junio.
El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Francisco Toscano, ha subrayado en un comunicado que esta bajada, que se mantiene por segundo año consecutivo, está vinculada al aumento progresivo de efectivos tanto de la Policía Nacional como de la Guardia Civil en la provincia. Desde 2018, la presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ha crecido un 7%. En concreto, la Guardia Civil ha reforzado su plantilla en un 7,1% y la Policía Nacional en un 6,9%.
Este retroceso en la delincuencia convencional se traduce en 2.069 delitos menos respecto al mismo semestre del año pasado. Los delitos que más han disminuido son los robos con fuerza en viviendas, comercios y otras instalaciones, que han bajado un 13,1%; los hurtos, con una reducción del 11,7%; y los delitos contra la libertad sexual, que descienden un 10,1%.
No obstante, la cibercriminalidad continúa al alza, con un incremento del 24% en la provincia, una tendencia que se repite a nivel nacional. A pesar de este aumento, el balance global de delitos en Sevilla refleja una caída del 1% durante los primeros seis meses del año.
La capital sevillana registra mejoras aún más destacadas
En el caso de la ciudad de Sevilla, los datos son todavía más positivos. La criminalidad convencional ha bajado un 9,3% respecto a 2024, mientras que el total de delitos ha disminuido un 4,7%. Sin embargo, los delitos informáticos han crecido un 17,1%. Entre los descensos más relevantes en la capital figuran las agresiones sexuales con penetración, que se han reducido un 14,7%; los hurtos, con un 13,5% menos; y los robos con fuerza, que han bajado un 12,2%.