Partidazo en mayúsculas del Antequera CF. Se había propuesto hacer historia en el Maulí y con su gente y lo consiguió. El 17 de mayo de 2025 quedará en el recuerdo como la fecha en la que certificó, por primera vez, la clasificación a todo un play-off de ascenso a Segunda División. La afición estuvo entregada y el equipo respondió en el tapete verde. Todo salió a la perfección, aunque hubo su dosis de sufrimiento. El Betis Deportivo se llegó a poner por delante en el marcador y al conjunto de Javier Medina le tocó remontar y encontró en Álex Rubio a un killer del área. Firmó un hat-trick que, junto al tanto de Iñaki Elejalde, garantizaron una gran victoria en el último compromiso como local del campeonato en el grupo II de Primera Federación (4-1).
Encuentro de muchísima tensión en tierras antequeranas por lo que había en juego. Ambiente de gala en el estadio ante la posibilidad de hacer historia y subir otro peldaño deportivo en el caso de jugar un play-off de ascenso. No hubo mucho para destacar de los primeros compases. Los dos equipos disponían de la capacidad de dominar el juego y, además, trataron de hacerlo, por lo que uno y otro tuvo sus fases de control de la posesión. El primer tiro a puerta fue de Pablo García. Jero Lario atrapó sin problemas el esférico. En el otro lado del campo, Juanmi Carrión se topó con Germán y, en un segundo intento, un defensor desvió un remate de Iñaki Elejalde.
Luismi Gutiérrez y Álex Rubio lo intentaron en fase ofensiva sin acierto. El primero con un lanzamiento muy desviado y el segundo con una vaselina. Superó al guardameta, pero no al defensor que le marcaba de cerca. La contienda se complicó con el gol de Marcos Fernández (0-1). El delantero bético demostró su capacidad para generarse el espacio en el área para fusilar la red y lo hizo tras una internada por banda izquierda de Lucas Alcázar. El tanto le vino bien a la escuadra blanquiverde para reaccionar y aumentar la intensidad. Una presión adelantada le permitió recuperar el esférico cerca de área y, en un pase en profundidad a la espalda de la defensa, Álex Rubio estableció la igualdad en el marcador (1-1).
El 14 del plantel de Javier Medina pudo ser el gran protagonista de la primera mitad. Tuvo en sus botas el 2-1 en un envío al área de Biabiany, pero incomprensiblemente mandó la pelota por encima del travesaño cuando la portería estaba sin portero. Un error que evitó la rápida remontada local. El ariete intentó que lo le afectara ese fallo y no dejó de intentarlo y generó otro peligroso ataque con un pase a Elejalde y posterior finalización defectuosa de Luismi Gutiérrez. Al descanso no se movió más el resultado (1-1). La segunda parte fue mejor porque Alejandro Marcelo se adueñó del centro del campo y eso permitió mejorar la fluidez del juego del cuadro anfitrión. Se convirtió en el mejor socio para enlazar la defensa y el ataque. De su talentoso pie izquierdo se generó el gol de la remontada.
La segunda parte fue mejor porque Alejandro Marcelo se adueñó del centro del campo
Alejandro Marcelo atisbó un desmarque de Aspra y le habilitó con un preciso envío y el 20 levantó la cabeza y decidió regalarle el 2-1 a Álex Rubio para que pudiera resarcirse de su error en la primera parte y firmar un doblete en el envite. Álex Rubio fue un auténtico dolor de cabeza para la zaga visitante. Se marchó solo en una veloz internada al área, disparó con potencia y el cancerbero intervino, pero dejó el balón suelto en el área y lo aprovechó Elejalde para anotar el 3-1. Dos dianas de renta que hicieron justicia al esfuerzo realizado por los jugadores para tomar las riendas del encuentro y el marcador y acercarse a un triunfo de muchísimo valor.
La ventaja tranquilizó al Antequera CF sin quitar el pie del acelerador y, en un centro al área de Juanmi Carrión, Álex Rubio cabeceó al fondo de las mallas el 4-1 y logróun hat-trick con el que redondeó una actuación espectacular. Los aficionados se lo estaban pasando bien en las gradas, se levantaron de su asientos y empezaron a aplaudir con fuerza a su equipo. Estaban orgullosos y contentos de lo que estaban viendo y quedaba todavía tiempo por delante para que sucedieran más cosas en el Maulí. En la recta final, Javier Medina pudo mover el banquillo y le dio minutos al canterano Topo, en dinámica de primer equipo, aunque en las últimas semanas había estado con el filial para ayudar en el ascenso a Primera Andaluza.
El árbitro pitó el final del envite y el fortín antequerano festejó el haber conseguido el objetivo de jugar el play-off de ascenso a Segunda División y continuar alentando ese sueño de estar la próxima campaña en la élite del fútbol nacional. Queda aún camino por recorrer y la entidad blanquiverde se ha ganado el derecho a disfrutar de lo que le vine una vez le ponga el punto y final al campeonato liguero, en el grupo II de Primera Federación, con un desplazamiento a Marbella en la 38ª jornada (sábado 24 de mayo – 19:00 horas).
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