El Área de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Antequera, bajo la coordinación del concejal delegado de Cultura y Patrimonio Histórico, José Medina Galeote, ha finalizado recientemente la restauración de una escultura de madera policromada que representa a Santo Domingo de Guzmán, ubicada en la capilla del Rosario de la iglesia de Santo Domingo.
La pieza, de pequeño formato, se encontraba, según señalan desde el Consistorio, en un estado de conservación muy deteriorado, resultado tanto del paso del tiempo como de anteriores intervenciones poco rigurosas. La talla, asentada sobre una peana también de madera policromada, presentaba numerosos repintes, pérdida de policromía, problemas de adhesión de la capa pictórica y, especialmente, la mutilación de ambas manos, que habían sido repuestas sin criterio artístico ni técnico.
Entre los principales defectos, se hallaba un báculo no original, fabricado con una simple tira metálica, y un libro modelado de forma tosca, unido a la palma de la mano izquierda como una única pieza. Además, faltaba el tradicional perro con la antorcha en la boca, elemento iconográfico característico de Santo Domingo de Guzmán.
Los trabajos de restauración se han desarrollado en varias fases. Inicialmente, se procedió a la fijación de la policromía y la limpieza general del conjunto, eliminando los repintes más agresivos, especialmente en el rostro. Posteriormente, se llevó a cabo la reposición de los elementos faltantes o mal sustituidos —como las manos, el báculo, el libro y el perro—, respetando tanto la iconografía tradicional como el estilo original de la obra. Se realizaron además tratamientos de estucado en las lagunas de la escultura y su peana, finalizando con una reintegración cromática minuciosa y la aplicación de una capa de protección que garantiza su preservación a largo plazo.
El concejal José Medina Galeote ha valorado muy positivamente esta intervención, destacando que “con acciones como esta seguimos apostando por la recuperación del legado cultural de Antequera, respetando siempre su valor histórico y su autenticidad”. Esta actuación se enmarca, en la política municipal de conservación del patrimonio histórico-artístico local, contribuyendo a mantener viva la memoria material y espiritual de la ciudad.
La restauración de esta imagen de Santo Domingo de Guzmán no solo devuelve su dignidad estética y devocional, según indican desde el Ayuntamiento, sino que refuerza el compromiso del Consistorio con la protección y valorización del patrimonio religioso y cultural del municipio.