En la entrevista de El Kanka con 101TV se tocan muchos temas, pero no podía faltar la visión sobre Málaga de uno de sus vecinos ilustres que se marchó hace ya casi muchos Madrid, pero que sigue con alegría todo lo bueno que ocurre en su ciudad sin dejar de tener una visión crítica de algunos aspectos. El cantautor, que estará en el 101 Music Festival Costa del Sol el próximo 18 de julio, señala por videollamada desde su residencia en la capital de España la ilusión por dar el primer concierto de su vida en La Malagueta y entiende como normal el auge de lo malagueño, al ser un sitio con una gran calidad de vida. Un contexto que, evidentemente, deja sus contrastes negativos.
¿Qué espera del concierto del 101 Music en la plaza de toros de La Malagueta?
La verdad es que últimamente en Málaga que no paran casi de abrumarme con cosas buenas que me han pasado muchas cosas, sobre todo lo último último año y medio. De repente tengo un montón de de reconocimiento de mi ciudad que siempre me ha tratado bien. Desde que vengo viviendo en Madrid, siempre que venía Málaga, me he encontrado bastante público. Siempre he sentido que que mis paisanos me querían, pero es verdad que el último año y medio ha sido todo una locura. Y fíjate, yo nunca había hecho un concierto mío completo ahí en la plaza de toros, que es un sitio emblemático para hacer el bolo en Málaga. Y me hace mucha ilusión poder pisar este escenario para un concierto mío íntegro por primera vez y creo que el público va a responder muy bien, la verdad. Yo ya me espero lo mejor.
El Kanka, nuevo artista confirmado del 101 Music Festival 2025
Viene con un repertorio de toda su carrera, además, ¿no?
En realidad vamos a hacer poquitos conciertos en el verano, sin contar una gira que hago ahora en México, que voy solo con la guitarra. En España vamos a hacer pocos conciertos, pero hemos hecho un repertorio súper guapo porque no estamos presentando canciones nuevas. Normalmente cuando tengo disco sé que cuesta un poquillo al principio las canciones nuevas te falta un tiempo para que la gente las asimile y haga suyas, para que tengan una historia alrededor de esa canción. Y yo siempre intento reivindicar lo nuevo para que se pueda ir refrescando el repertorio y tenga sentido. Pero este verano mi idea es me da igual, yo quiero que la gente se lo pase bien, quiero que la gente baile. Es un bolo muy festivalero, muy ‘palante’ con todo. Lo probamos en Valencia, que sido el primer concierto de la gira y la gente respondió súper entregada. Y hacerlo en Málaga que es mi tierra, yo quiero que la gente disfrute. Vamos a pasarlo bien. Yo creo que nosotros lo vamos a pasar bien y la gente que venga también.
Hizo el himno del 120 aniversario del fútbol en Málaga sin ser para nada futbolero, ¿ha seguido el recorrido de aquella canción y del equipo desde entonces?
Pues me pasó una cosa este año que me he hartado de las redes sociales y me las he quitado. Entonces si antes no lo seguía, entonces si antes no me enteraba, ahora menos todavía, pero tengo algunos enlaces que me van diciendo que el Málaga subió, que se tiró un montón de tiempo que no perdió ningún partido, y a mí me hacía mucha ilusión. Yo no me considero responsable en absoluto de eso. Yo solo hice la canción que me encargaron pero fue una bonita casualidad que a partir de que se publicó el himno el equipo acabó ascendiendo, fue muy bonito. Creo que la gente, algunos, incluso lo lo enlazaron a la canción, yo creo sencillamente que es una casualidad, pero una casualidad muy bonita.
¿Cómo se ve Málaga desde Madrid?
Cuando voy es con una alegría inmensa. Me imagino que le pasa a cualquiera con su ciudad. Le pasará a la gente de Logroño cuando vuelve a su ciudad. Es la ciudad donde has nacido, donde has sido niño y uno vuelve queriendo reencontrarse con eso. Yo en mi caso, por desgracia, que no tengo ya padres, pero sí que mi hermana vive allí en Pizarra, que voy de vez en cuando, y tengo muchísimos amigos de la infancia que conservo todavía. Entonces cuando voy, lo que pienso es más en las personas que tengo allí y en verlos a todos. Que a veces es un agobio porque no da tiempo a verlos a todos.
¿Y le llama la atención que haya sido calificada en los últimos años como ciudad de moda?
A mí no me ha sorprendido del todo que Málaga se esté poniendo tan de moda, porque siempre he visto a Málaga como una ciudad increíble. Yo soy ya prácticamente madrileño con todos los años que llevo aquí y es una ciudad súper acogedora, pero a nivel calidad de vida no se puede comparar con Málaga. Yo ya era muy consciente de las de las de las bondades que tenía Málaga. Una ciudad con un clima de puta madre, La gente es súper cercana, es mediana y hay de todo, pero no más obvio. O sea, es una ciudad muy perfe, tiene playa, tiene de todo. No me extraña que se esté poniendo tan de moda con sus cosas buenas y su cosa malas. Me acuerdo una vez que fue, creo que fue antes de la pandemia o justo después, me di una vuelta y digo qué barbaridad, cuánta peña, cuánto ha cambiado todo. Y me acuerdo que me metí en una cervecería así de cervezas artesanas que hay en la Plaza de la Merced, y estaba solo el dueño en la barra me saludó y le digo «tío, hay que ver cómo está Málaga y no sé qué». Y él me dijo «tío, y que no pare porque aquí entra mucho guiri, ¿sabes?». Entonces, dices, es bueno, pero esa incongruencia es difícil.
¿Y se puede llegar a un equilibrio?
No sé, es difícil, yo creo que no tiene fácil solución. Al final, España tiene una identidad tan larga de un país que vive del turismo. Y en ese sentido Málaga se está postulando ahí como primera potencia y da muchos puestos de trabajo a la vez que hace que un montón de malagueños se tengan que ir fuera de la ciudad, que se encarezca todo muchísimo, que esté todo pesadísimo de gente, que la ciudad pierda un poquito de magia. Pues yo no lo sé. No sé cuál es la solución. Ojalá. Ojalá hubiera un un punto intermedio, ¿no? Pero no sabría decirte, no sabría decirte cuál, la verdad. Yo cuando voy ya te digo, pese a que a veces me da rabia cuando veo el centro así, tan distinto. Voy a ver a mi gente y voy a reencontrarme con mi infancia también y soy feliz.