Con la tradicional fumata blanca elevándose sobre la Capilla Sixtina y la proclamación del «Habemus Papam», la Iglesia católica ya tiene a su nuevo líder espiritual. El Papa León XIV, Robert Francis Prevost, ha comenzado su ministerio tras ser elegido por mayoría de dos tercios del Colegio Cardenalicio. Su primer gesto fue dirigirse a los miles de fieles que abarrotaban la Plaza de San Pedro, desde donde pronunció un emotivo discurso de apertura.
El nuevo Pontífice, de nacionalidad estadounidense y miembro de la Orden de San Agustín, cuenta con una dilatada trayectoria pastoral y académica. Durante su tiempo como obispo de Chiclayo, en Perú, destacó por su cercanía a las comunidades locales, la defensa de los derechos de los más vulnerables y la promoción de la formación pastoral. Su nombramiento es visto como un claro gesto de continuidad con el estilo pastoral y las reformas emprendidas por su predecesor, Francisco.
Primera misa
Según confirmó Matteo Bruni, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el papa León XIV celebrará este viernes a las 11.00 horas su primera misa en la Capilla Sixtina junto a los cardenales electores. El domingo presidirá el rezo del ‘Regina Coeli’ desde el balcón principal de la Basílica de San Pedro, un primer encuentro espiritual con la comunidad mundial de fieles.
La ceremonia oficial de inicio del pontificado, que incluye la imposición del palio y el anillo del Pescador, está prevista para los próximos días. Esta celebración pública marca oficialmente la asunción del cargo, aunque canónicamente el papa se convierte en tal desde el momento de su aceptación en la Capilla Sixtina. Además, en las próximas semanas el Pontífice deberá definir la estructura de su Curia, confirmando o renovando cargos clave, como el del secretario de Estado y los prefectos de los distintos dicasterios vaticanos.
León XIV: un nombre cargado de simbolismo
La elección del nombre León XIV ha despertado interés. Se interpreta como un guiño a figuras históricas como León I, conocido como León Magno, que defendió la primacía romana y la fe cristiana frente a amenazas externas. Aunque el nuevo Pontífice no ha detallado la motivación detrás de su elección, muchos observadores la ven como una declaración de intenciones de firmeza y liderazgo en un mundo de desafíos crecientes.
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Desde la Basílica de San Pedro, León XIV expresó su compromiso con una Iglesia «abierta a todos, especialmente a los que sufren». Agradeció a Francisco su legado y llamó a construir «puentes de diálogo y encuentro» para promover la paz y la justicia. En su discurso, exhortó a la Iglesia a ser «misionera y sinodal», acogiendo a quienes más lo necesitan.
El Pontífice recordó especialmente a la comunidad de Chiclayo, su anterior diócesis, dedicándoles un afectuoso saludo en español. “Un pueblo fiel que ha acompañado a su obispo con tanta generosidad”, afirmó visiblemente emocionado antes de concluir su intervención rezando un Ave María por la Iglesia y por la paz mundial.
Expectación mundial y primeras reacciones
La elección de León XIV ha sido recibida con expectación global. Desde líderes políticos y religiosos hasta peregrinos en Roma han expresado sus mensajes de felicitación. La comunidad católica peruana, especialmente en Chiclayo, se mostró profundamente conmovida al ver a su antiguo obispo asumir la máxima responsabilidad eclesial.
El papa León XIV afronta importantes retos: la creciente secularización, la necesidad de avanzar en la reforma de la Curia, la lucha contra los abusos dentro de la Iglesia y el fortalecimiento del diálogo interreligioso. Además, su experiencia misionera le otorga una visión internacional que muchos esperan que se traduzca en un liderazgo inclusivo y global.