El piragüismo español terminó este domingo el mejor Mundial de su historia, el celebrado en Duisburgo (Alemania), después de sumar cinco medallas más en la última jornada, 13 en total, además de nuevos billetes para los Juegos Olímpicos de París 2024.
La jornada comenzó con la plata de María Corbera en el C1 500, el tercer metal para la madrileña en aguas alemanas. Después, Adrián del Rio y Rodrigo Germade se llevaron el bronce y el billete olímpico para su barco en el K2 500.
Igualmente, salieron bien contentos los sevillanos Pablo Martínez y Cayetano García quienes, a pesar de no lograr defender el título mundial, se subieron al podio con un bronce y otro pasaporte a París 2024 en el V2 500.
Además, el K2 500 mixto logró otro bronce con Iñigo Peña, que ya había salido campeón del mundo el día anterior junto a Pedro Vázquez en el K2 1000 metros, junto a Barbara Pardo.
Mientras, ni Noel Domínguez, ni Cristina Soutelo (C1) tuvieron suerte en sus finales y el primero concluyó noveno y la segunda décima. Sin embargo, el broche la brindó Estefanía Fernández, oro en el K1 5000 en una dura carrera como no podía ser de otra manera.
España concluye el campeonato en la segunda posición del medallero con 13 metales, al que hay que sumar la plata de González Mella en Paracanoe. El pasado año, en Canadá, se lograron siete (récord en ese momento) con lo que España se superó a lo grande con tres oros, cinco platas y cinco bronces.