Sara Baras (San Fernando, Cádiz, 1971) vuelve a Málaga, una provincia con la que tiene una relación especial. La gaditana actuará este viernes 11 de julio junto a su compañía con el espectáculo ‘Vuela’, en lo que apunta a otra nocha mágica de danza, arte y flamenco en La Malagueta. El 101 Music Festival Costa del Sol recibe con los brazos abiertos a una de las grandes del baile jondo en España, con su compañía que lleva más de un cuarto de siglo brillando por escenarios de todo el mundo.
Además, esta cita es muy especial puesto que el espectáculo ‘Vuela’ está dedicado a otro andaluz universal como Paco de Lucía, un genio al que tuvo la suerte de conocer y compartir momentos sobre las tablas. Atiende a 101TV por teléfono en una entrevista en la que manifiesta el aplomo de alguien que ha zapateado por medio mundo y que lleva las enseñanzas del maestro de Algeciras a gala y el flamenco por bandera, la mejor «marca España» posible. Del genio de la guitarra se llevó la mejor enseñanza: nada se consigue sin muchas horas de trabajo a cuestas.
Sara Baras rendirá homenaje a Paco de Lucía en el 101 Music Festival Costa del Sol
¿Tiene ganas de actuar en La Malagueta?
Es un sitio donde he actuado ya muchas veces y he tenido noches especiales. Con Málaga tenemos una relación preciosa y es muy bonito volver con ‘Vuela’ allí otra vez, porque ya lo hicimos en el Cervantes y la verdad que fueron unas noches preciosas y poder hacerlo ahora en la plaza de toros de La Malagueta que es tan mágica y tan bonita pues la verdad que es un regalazo. Es sin duda uno de los grandes sitios de la gira.
«actuar en la malagueta que es tan mágica y tan bonita es un regalazo»
El espectáculo gira en torno a Paco de Lucía, al que conoció en persona, ¿cómo recuerda del maestro?
Este espectáculo celebra los 25 años de compañía y lo hace en homenaje a Paco que es el maestros más influyente que tenemos en el flamenco. Sirve para pensar en la evolución de estos 25 años, donde el maestro estaba muy presente. No sólo con sus consejos, no sólo he tenido la suerte de conocerlo desde que soy una niña, sino que he podido aprender de él a lo largo de toda mi carrera en lo profesional y en lo personal. Realmente, he tenido la suerte de poder trabajar con él y de hacer cosas muy puntuales que han sido para mí muy importantes. Entonces, poder dedicarle este espectáculo lleva una parte emocional y una parte sentimental muy grande, pero sobre todo muchísimo agradecimiento.
He leído que alguna vez le dijo que lo importante era no imitar, sino buscar sello propio. ¿Fue el mejor consejo que le dio?
Realmente para mí de todos los consejos que me dio el maestro, el más importante es el del trabajo. El de que las cosas se consiguen con muchas horas de trabajo, no viene nada gratuito. El no parar de trabajar, de ensayar, de aprender, el estar siempre trabajando y sin olvidar de dónde vienes y quién eres, eso es algo importantísimo. A partir de ahí tú ya puedes tener la oportunidad de fusionar con otros registros, pero eso sin olvidar que eres una flamenca y tu tierra y tus raíces. Tener la oportunidad de poder dejarte llevar por lo que sientes y ahí aparece tu propia personalidad, pero siempre sin olvidar quién eres.
«De todos los consejos que me dio el maestro, el más importante es el del trabajo, el de que las cosas se consiguen con muchas horas de trabajo»
Leí una entrevista de Farru, el bailaor, que decía algo así como que a Paco de Lucía como a la mayoría de tocaores le gustaba más acompañar al cante y que el baile no le llamaba la atención hasta que vio a su abuelo Farruco. ¿Qué cree que le gustaba del baile al guitarrista de Algeciras?
A Paco le encantaba el baile, Paco ha tocado para bailar toda la vida desde que empezó jovencito, que contaban Paco y Pepe que se iban de gira y eran unos niños y tocaban para bailar. Es verdad que dicen que lo que más le ha gustado siempre ha sido el cante porque, por ejemplo, cuando hablaba de Camarón era para él era algo sobrenatural la garganta y el cante de que tenía. Pero, realmente él además sabía mucho de todo lo demás. Nada más que hay que verlo, por ejemplo, con Antonio Gades cuando la película de Saura. Sobre todo era un maestro que defendía el flamenco, por encima de todo era un flamenco, un enamorado del flamenco y defendía el flamenco como un arte grande y gracias a él hoy día tenemos puertas abiertas en medio mundo. Gracias a él y a maestros como él, que defendían el arte por encima de todo.
Me llama la atención eso que dice y un titular suyo de hace tiempo que decía que si el flamenco no fuera español lo tendríamos en un altar. ¿Sigue estando infravalorado como arte? ¿No se le da el vuelo que se le da en otros países donde no es algo autóctono?
Mire, lo nuestro es una compañía privada, que se mantiene del público y yo no tengo palabras suficientes para agradecerle al público, al público en general de medio mundo. Nuestro público es maravilloso, la gente quiere el flamenco y llena los teatros y escucha flamenco. Hace poco hacía la Fundación de Paco de Lucía un estudio sobre el flamenco y la cantidad de gente joven que escucha el flamenco y que quiere al flamenco, y la verdad es que nosotros tendríamos que ser conscientes del valor que tiene nuestro arte, que hoy día está en el mundo entero y es nuestro. Eso es algo que tendríamos que darle más valor. Pero respecto al público yo no tengo ni una queja.
Decía más bien a nivel institucional, académico incluso…
Por eso decía que nuestra compañía es privada, es algo privado, y le debemos principalmente todo al público.
¿Cuál es la clave del éxito para estar tantos años sobre las tablas?
No bajar la guardia y mucho trabajo. Intentar tener el mejor equipo del mundo, que en mi caso yo creo que tengo la suerte de tenerlo. Y darle las gracias a que el público te responde desde el principio. Nosotros seguimos ahí, llevamos más de 5.000 funciones, que es una barbaridad. Por eso decía que había entendido perfectamente la pregunta anterior y yo entiendo que la gente joven tendría que tener más estudios, tendría que haber más escuelas apoyando nuestro arte, pero en mi caso como compañía privada también digo que siento un agradecimiento tan fuerte al público y a todos mis maestros, y a todos los que hacen posible que nosotros sigamos ahí. Es algo de lo que me siento además muy orgullosa porque soy marca España, me nombraron embajadora honoraria de la marca España. Es decir, no es solamente que representemos el flamenco por medio mundo, sino que lo hacemos también siendo marca España. Hay una parte que yo me siento muy orgullosa de todo lo nuestro, y es que creo que tenemos el mejor público del mundo y la mejor afición del mundo. Pero volviendo a lo de antes, es verdad que tendríamos que tener más ayudas y tendría que haber más escuelas para que la gente joven tenga más espacios donde poder aprender y salir adelante.
En definitiva, creérnoslo un poquito más. Me acuerdo cuando se murió Paco de Lucía, había guitarristas del mundo del rock muy conocidos que decían que era su gran influencia, el referente de la guitarra. Guitarristas algunos que luego vienen a España con giras mastodónticas y son muy celebrados. No deja de ser llamativo cómo magnificamos lo foráneo, lo anglosajón, a guitarristas que han bebido directamente de Paco de Lucía por poner un ejemplo de una de esas figuras universales.
Sí, es cierto. Y después vamos fuera de España, nos vamos a Australia o hacer la gira por Asia, que por ejemplo con ‘Vuela’ hemos estado en Singapur y Hong Kong, y te vas al otro lado del mapa y ves el respeto y la admiración que le tienen al flamenco. Y, sobre todo, el cariño que le tienen al flamenco, y te sientes súper orgullosa. Es algo bestial, y estamos dentro de festivales de jazz, festivales de teatro, festivales de música, festivales de danza, en teatros que son mundialmente conocidos, y hay días dedicados al flamenco. Eso es algo que es gracias a maestros como Paco, que nosotros ahora podemos seguir con nuestro arte, tocando en sitios que de verdad que es un regalazo. Es cierto Paco de Lucía ha sido el guitarrista yo creo que más importante de la historia del flamenco y uno de los más importantes de la historia de la música en general.
Bueno, el baile también ha llamado siempre la atención mucho en países como Estados Unidos o de Asia como Japón, ¿no?
El baile está ahora mismo de verdad en el mundo entero. Gente como Carmen Amaya, Antonio Gades, Farruco, El Güito, Manolete… Empiezas a nombrar y no paras. Es una cantidad de maestros importantes. Hay que recordar que la primera española que bailó en la Casa Blanca fue Carmen Amaya. Es una generación que son unos maestros que han abierto el flamenco al mundo y eso es algo muy bonito, la afición que encuentras en sitios tan lejanos con costumbres tan distintas, con una cultura tan diferente y que, sin embargo, después el flamenco se le clave en el corazón. Siempre he dicho que el flamenco no tiene pasaporte ni fronteras ni nada, que va directo al corazón, y gracias a estos maestros hoy día está en el mundo entero. La marca España que decíamos
¿En qué ha cambiado el público durante estos más de 25 años?
Empiezo diciendo otra vez que el público es maravilloso, desde el principio ha sido maravilloso y sigue siéndolo. El respeto que hay que tenerle al público es porque se lo ha ganado. El público es serio, y es verdad que hoy día tenemos la suerte de tener más facilidad para poder tener información sobre las cosas, y eso hace que el público está culturalmente muy preparado. A mí me encanta, yo no tengo de verdad palabras suficientes para agradecerle al público. La compañía lleva ahora mismo 27 años porque llevamos dos años con ‘Vuela’ y lo empezamos celebrando cuando cumplimos 25 y seguimos ahí, que es una cosa increíble.
¿Cómo mantiene la ilusión?
Me llama la atención que pueda seguir con la misma ilusión que al principio, y mientras que el cuerpo aguante vamos a estar ahí intentando soñar y hacer soñar. Ya estamos pensando cómo será el próximo espectáculo y empezando a a crearlo, a la vez que todavía nos quedan casi 80 funciones hasta el año que viene. Lo importante es el que equipazo que tengo la suerte de tener, que además de las gracias al público se lo debo todo a mi equipo: músicos, bailarines, técnicos, la parte de producción… Con todo ello, seguimos fuertes. Supongo que el cuerpo llegará un momento en el que diga hasta aquí hemos llegado y en ese momento pues seguiré, pero desde otro punto de vista, desde otro lugar, porque esto es algo que amamos profundamente. Yo, personalmente, estaré hasta que que podamos estar ahí dándolo todo