La semana pasada una moción del Ayuntamiento de Jumilla, gobernado por el PP con el apoyo de Vox, desató la polémica en el debate social y político: la medida pretendía prohibir la celebración de ritos musulmanes en espacios públicos como instalaciones deportivas. Sin embargo, este lunes el Ejecutivo central ha presentado un requerimiento al Ayuntamiento de Jumilla (Murcia) para que deje sin efecto la moción. Según el Gobierno, esta medida «vulnera el derecho fundamental a la libertad religiosa», recogido en el artículo 16 de la Constitución.
El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha señalado que la moción afecta especialmente a los actos que la comunidad musulmana venía realizando desde hace años en esos espacios. “Ante la intolerancia no hay medias tintas. PP y Vox no pueden decidir para quién sí hay libertad de culto y para quién no. Es un derecho constitucional”, ha defendido.
Polémica en Jumilla por el veto de PP y Vox a las celebraciones islámicas en espacios públicos
El requerimiento, firmado por la delegada del Gobierno en Murcia, Mariola Guevara, subraya que la iniciativa del Ayuntamiento carece de justificación técnica u organizativa y responde únicamente a una finalidad ideológica de exclusión religiosa. Además, recuerda que los poderes públicos deben mantener la neutralidad religiosa y no pueden limitar el uso de espacios públicos sin motivación legal adecuada.
Por último, el Gobierno advierte que la moción excluye de facto a la comunidad musulmana sin ofrecer alternativas razonables ni demostrar incompatibilidad funcional, lo que constituye una vulneración clara de los principios constitucionales de libertad religiosa, igualdad y neutralidad administrativa.
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