Una de las preguntas que se hacen ahora mismo usuarios y consumidores es cómo reclamar algún tipo de daño a las compañías o a cualquier otra entidad que sea responsable de los posibles daños que ha podido llevar este apagón general. Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomiendan, en primer lugar, “acreditar todos los daños porque no sabemos a quién se lo vamos a poder reclamar”. Así lo asegura el delegado de Andalucía de la OCU, José Carlos Cutiño.
“Ahora mismo estamos en una situación de absoluta incertidumbre”. “No sabemos cuál ha sido la causa del apagón, la distribuidora sólo sería responsable de esos daños si no se hubiera producido por un agente externo o atmosférico pero también puede haber otro tipo de responsabilidades”. Es por ello que desde la OCU aseguran que es importante tener constancia de cuáles son los daños, “que además existe una relación causa-efecto entre el apagón y los daños y después poder documentar los presupuestos de reparación”.
Responsable de los daños
Cutiño explica que normalmente los apagones o cortes de luz suelen dejar una huella, “por ejemplo, los electrodomésticos y los aparatos electrónicos suelen afectar a la fuente de alimentación, a la resistencia, o incluso puede afectar a la placa”. Una vez identificado el daño hay diferentes vías en relación a quien responsabilizar de estos daños. “Por un lado, si finalmente se achaca que la responsabilidad es la distribuidora porque es responsable del mantenimiento de la continuidad y calidad del suministro, y no se ha producido un agente externo, tendremos que reclamar frente a ella y sus aseguradoras”. Por el contrario, si no es así “y ha habido esa causa de fuerza mayor, tenemos que mirar nuestro seguro y ver qué es lo que nos encontramos”.
Recopilar pruebas y documentos es fundamental para hacer frente a los daños que ha podido producir el apagón. “Si tenemos una avería, tener un presupuesto de la reparación, guardar la factura, comunicarte con el seguro, presentar las reclamaciones de los reintegros de los importes de los pasajes o de los alojamientos que tuviéramos reservado, si no hemos podido presentarnos a un examen, a una entrevista de trabajo…” Es necesario documentar todo esto para, “llegado el caso, poder utilizarlo como un soporte para nuestra reclamación, incluso para nuestra justificación si fuera necesario”.
Por otro lado, existe también una posible indemnización de la que tendría que hacerse cargo la distribuidora “sobre la continuidad y la calidad del suministro, incluso hay establecido una serie de compensaciones a los consumidores cuando se producen cortes en función de las horas en las que no se ha prestado el suministro”, explica Cutiño.
«Causa de fuerza mayor»
Los daños producidos por el apagón pueden ser muy variados: electrodomésticos averiados, trenes perdidos, alojamientos, exámenes, actividades que han tenido que cerrar sus puertas… “Esto quiere decir que aquí también entramos en un ámbito mucho más complejo y ahí sólo va a ser responsable la compañía de indemnizarlos como responsable civil de ellos, en aquel caso de que no haya sido esas circunstancias de fuerza mayor imprevisible, inevitable e ineludible, lo que suele definir lo que es una causa de fuerza mayor”.
Además de los daños materiales, el delegado de la OCU ha querido dejar claro que el consumidor “siempre va a tener derecho de exigir la recuperación de los importes”, al referirnos a pérdida de vuelos, trenes o hoteles. “Aquí sí que para el consumidor ha existido una causa de fuerza mayor, algo que le ha impedido poder disfrutar del servicio y la devolución de los importes de los pasajes es inevitable”.
La OCU pide al Gobierno transparencia
“Esto va a ser realmente una batalla larga”, explica José Carlos Cutiño, ya que habrá que tratar cada caso y justificarlos, “esperamos que además las empresas no pongan excesivo problema porque sería un poco absurdo”. Es por ello que se recomienda también “paciencia” para afrontar las próximas semanas.
A partir de ahora, comienza un proceso complejo y lento en primer lugar, porque hay que diagnosticar el problema “para que no se vuelva a repetir y para saber quien es el responsable”. “Nosotros lo que pedimos es mucha transparencia al gobierno, que quede claro porque se produce esto para que no se genere una alarma injustificada en la población”. Es por ello que desde la OCU aseguran que necesitamos un gobierno “ágil” y “paciencia” en la población “porque el trámite de las reclamaciones no va a ser ni sencillo ni rápido”, ha dejado claro el delegado de la OCU en Andalucía, José Carlos Cutiño.