Las fuertes lluvias que durante la tarde de este viernes se dejaron notar en Granada provocaron anegaciones y grandes riadas en el municipio de Íllora. Fue la más afectada de las localidades en las que las precipitaciones obligaron a activar el aviso amarillo en la provincia. Permaneció activo hasta las 22.00 horas, lo que provocó varias incidencias vinculadas sobre todo a la inhabilitación de carreteras.
En concreto, como informó el servicio de Emergencias 112 de Andalucía, la lluvia condicionó especialmente tres carreteras de la provincia. El tráfico se vio especialmente afectado en la A-4154, en la que se produjeron inundaciones en dos puntos. Fue en el kilómetro 32, a la altura del término municipal de Montefrío, y en el punto kilométrico 29, en Algarinejo.
La tercera fue la carretera A-336, en el kilómetro 12, a la altura de Íllora. El municipio sufrió importantes riadas que propiciaron una tarde de tensión y temor. Las calles quedaron completamente anegadas a causa de la intensidad de la lluvia. El agua también entró en algunas viviendas, que quedaron inundadas.
Domingo plácido
El aviso amarillo quedó desactivado en la provincia ya en la noche de este viernes, para dar paso a una jornada despejada este sábado. La previsión meteorológica también vaticina un domingo similar, con cielos despejados en la provincia y sin probabilidad alguna de lluvia en los términos granadinos. Las temperaturas mantendrán sus valores casi primaverales, con máximas que se moverán en torno a los 25ºC y mínimas que oscilarán cerca de los 11ºC, algo más elevadas en la Costa.
No hay, por tanto, previsión de que se active ningún aviso durante toda la jornada. De hecho, el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología también avanza un lunes plácido. Será el martes, en cambio, cuando los cielos volverán a nublarse y se elevará notablemente la probabilidad de que se produzcan precipitaciones en distintos puntos de la provincia.