La Policía Local de Granada ha localizado en pocas horas al presunto autor de una pintada vandálica en el aljibe del Zenete, un inmueble declarado Bien de Interés Cultural ubicado en pleno corazón del Albaicín. La rápida intervención ha sido posible gracias a la colaboración ciudadana y a los dispositivos reforzados de vigilancia en zonas patrimoniales, según ha informado el Ayuntamiento de Granada.
El aljibe, recientemente restaurado como parte de las actuaciones de mejora en el patrimonio histórico, fue objeto de una acción vandálica que dañó su fachada. La actuación policial no solo ha permitido identificar al presunto responsable, sino que también refuerza el mensaje institucional de tolerancia cero contra el vandalismo gráfico en el entorno histórico de la ciudad.
Desde el Ayuntamiento se ha subrayado que este tipo de actos, cuando afectan a bienes protegidos, no quedan impunes y pueden tener consecuencias administrativas y penales para sus autores.
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Hasta 3.000 euros de sanción y posibles responsabilidades penales
La concejala de Protección Ciudadana, Ana Agudo, ha detallado que el autor de la pintada “se enfrenta a una sanción administrativa de hasta 3.000 euros, que se aplicará con carácter supletorio al procedimiento penal que pudiera derivarse de los hechos, dado el alto valor histórico del bien afectado”.
Además, ha recordado que la Junta de Andalucía, como administración competente en la gestión de los BIC, puede imponer sanciones que alcanzan los 250.000 euros, en función de la gravedad de los daños causados.
Agudo ha puesto en valor la eficacia de la intervención policial y ha destacado la coordinación entre Policía Local, el Área de Limpieza y el Servicio de Mantenimiento como factores clave en la respuesta rápida.
La concejala también ha confirmado que el Área de Limpieza ya ha activado el protocolo de intervención, adaptado a las condiciones de conservación de los bienes patrimoniales. En este caso concreto, la actuación requerirá especial atención debido a la naturaleza del material y a que el aljibe fue recientemente restaurado.
La estrategia contra el vandalismo
El caso del aljibe del Zenete se enmarca dentro de una estrategia municipal más amplia para la protección del patrimonio histórico frente a actos vandálicos. Entre las medidas adoptadas, la concejala Ana Agudo ha destacado la autorización general concedida recientemente por la Comisión Provincial de Patrimonio, que permite al Ayuntamiento actuar de forma inmediata en la eliminación de pintadas en entornos BIC.
Asimismo, el nuevo contrato de limpieza incluye la creación de brigadas diarias específicas contra grafitis, que trabajan de manera coordinada con los servicios de seguridad y mantenimiento urbano. A ello se suma la instalación progresiva de cámaras de videovigilancia en puntos sensibles del patrimonio, que ya está dando resultados positivos en términos de disuasión y detección.
“La rapidez con la que hemos actuado en este caso no es casualidad, sino el resultado de una estrategia bien definida, que combina vigilancia, respuesta inmediata y sensibilización ciudadana”, ha subrayado Agudo. Para la edil, estos tres pilares son fundamentales para preservar el patrimonio y contribuir a una mejor convivencia en la ciudad.
Por último, la responsable de Protección Ciudadana ha enviado un mensaje claro: “El que la hace, la paga. No vamos a permitir que se dañe impunemente lo que nos pertenece a todos los granadinos”.
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