Como un jarro de agua fría. La muerte de Antonio, el subinspector de la unidad Gotham (dedicada a investigar delitos nocturnos), ha sido un verdadero palo para los compañeros del Cuerpo. «Aunque en nuestra profesión nos jugamos la vida cada día, nunca piensas que va a llegar algo así, y mucho menos en estas circunstancias», señala el secretario provincial de Jupol en Málaga, Enrique Picarzo.
Los agentes que conocían al fallecido advierten que era un compañero muy profesional y presto a perseguir a los delincuentes con su unidad nocturna. Todos ellos mandan sus más sentidas condolencias a amigos y familiares de Antonio, la víctima de 48 años que ha perdido la vida en un trágico accidente durante la madrugada de este jueves en Málaga. También se animan entre ellos en una jornada dura para la profesión y claman por la necesidad de que las instituciones se tomen en serio los problemas de seguridad y pongan más recursos.
Persecución trágica: tres atracadores y un policía mueren en Málaga tras el robo de una farmacia
Si bien el accidente no fue a causa de la persecución del asalto a una farmacia, desde Jupol señalan que se trata claramente de un caso ‘in itinere’. La víctima no estaba de servicio, aunque sí regresaba de su puesto de trabajo. Al estar dentro del trayecto entre su trabajo y el domicilio, se considera como un accidente laboral, lo que será importante resaltar de cara a un futuro por parte de la propia familia del fallecido.
El fallecido deja viuda y dos hijos
El accidente letal ha acabado con la vida de los cuatro implicados, los tres atracadores y el agente, un subinspector malagueño de 48 años que estaba un grupo nocturno de la Comisaria Provincial Málaga. Este policía nacional fallece dejando viuda y dos hijos menores de edad.
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