El Juzgado de lo Penal número 5 de Granada ha dejado visto para sentencia pasado el mediodía de este viernes el juicio del caso del subinspector del cuerpo de la Policía Local de la capital granadina que se enfrenta a una petición de la Fiscalía de casi siete años de cárcel por la presunta comisión de varios delitos de violencia machista.
Fuentes del caso consultadas por Europa Press han indicado tras la segunda sesión del juicio, que se ha celebrado desde el pasado miércoles a puerta cerrada, al ser un caso que ha afectado a menores, que las partes han confirmado sus peticiones iniciales para el procesado. La Fiscalía interesa de este modo un total de seis años y diez meses de prisión por la presunta comisión de delitos de violencia física y psíquica habitual, de menoscabo psíquico y de descubrimiento y revelación de secretos perpetrados supuestamente contra su expareja y una de las dos hijas que tienen en común.
La acusación particular eleva su petición de pena hasta más de 15 años mientras que la defensa interesa la libre absolución. El juicio se ha reanudado en la mañana de este viernes con la declaración de peritos y policías, antes de los informes y las conclusiones definitivas de las partes, después de que el pasado miércoles el acusado negara los hechos y testigos confirmaran supuestos indicios contra él que habían manifestado previamente en la fase de instrucción del caso.
Se dio la circunstancia de que, a la salida de esa primera sesión del juicio visto para sentencia este viernes, el pasado miércoles por la tarde, a la salida de la sala, en el edificio de Caleta, el procesado volvió a quedar detenido por un supuesto quebrantamiento de la orden judicial de alejamiento que tiene sobre su exmujer ocurrido al parecer el pasado fin de semana.
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Granada, en funciones de juzgado de guardia este jueves, acordaba tras pasar a disposición judicial la puesta en libertad provisional de este mando de la Policía Local de Granada tras esta última detención por la presunta comisión del delito de quebrantamiento.
Sobre el caso enjuiciado en el Juzgado de lo Penal 5, el cual daba origen a esta orden de alejamiento, el ministerio público, en su escrito de conclusiones provisionales, al que tuvo acceso Europa Press, señalaba que durante la relación con su expareja, pero sobre todo a partir de 2017, el acusado habría venido ejerciendo en el domicilio que compartían «de forma continuada, agresiones tanto verbales» como «conductas de control, debido también a su carácter machista y celoso como agresiones físicas».
Estas últimas habrían consistido en «empujones» o «golpes en la cabeza» o «en el brazo», extendiéndose las agresiones tanto físicas como psíquicas a las dos hijas «con desprecios y admoniciones constantes» sobre todo hacia la mayor, a la que habría causado lesiones.
Igualmente «el acusado sin consentimiento» de su «esposa separada ya de hecho» se habría «apoderado de contactos y fotos personales extraídos de los terminales del ordenador y del teléfono móvil de los que era usuaria».
Trataba al parecer de «averiguar si mantenía alguna otra relación sexual o sentimental así como las amistades que pudiese tener» utilizando también supuestamente la aplicación de un rastreador tecnológico «con el objeto de controlar sus movimientos y saber dónde y con quién» habría estado «en cada momento» su ex.
Caso Viogén
Con vinculación a este caso de supuesto maltrato machista que ha ido a juicio, pero en unas diligencias separadas, el Juzgado de Instrucción 4 de Granada investiga a varios agentes de la Policía Local de Granada en el denominado caso Viogén.
En este caso se investiga la presunta comisión de un delito de revelación y descubrimiento de secretos tras acceder a datos de la expareja del subinspector, que ha sido recientemente relevado como jefe de estudios del cuerpo de seguridad municipal para destinarlo a tareas de archivo, en el citado sistema de seguimiento de víctimas de violencia machista.