Roberto Saviano escribió en 2006 un libro llamado ‘Gomorra’ que destapó los secretos de la mafia napolitana conocida como la Camorra. Ese libro le cambió la vida para siempre: desde entonces vive escondido, con escolta policial las 24 horas y amenazado de muerte por los criminales que expuso.
Este lunes 14 de julio, un tribunal de Roma confirmó definitivamente las condenas contra Francesco Bidognetti, un poderoso jefe mafioso del clan Casalesi, y su abogado Michele Santonastaso por amenazar directamente a Saviano y a la periodista Rosaria Capacchione.
«Nunca había pasado»
Las intimidaciones se produjeron en 2008, durante uno de los juicios más importantes contra la Camorra. En plena audiencia, el abogado del mafioso leyó un documento que amenazaba específicamente a Saviano y a Capacchione, responsabilizándolos de las condenas que estaban recibiendo los criminales.
«Nunca había pasado en un tribunal, en ninguna parte del mundo», declaró Saviano tras conocer la sentencia. El escritor explicó que los mafiosos «no atacaron la política, sino el periodismo», enviando un mensaje claro a quienes se atrevieran a contar sus actividades criminales.
La sentencia fue leída a las 15.30 horas y recibida con aplausos en la sala, pero Saviano rompió a llorar abrazado a su abogado. «La victoria queda en las actuaciones del juicio, pero mi vida ha sido destrozada», declaró el escritor. «Me han robado la vida», lamentó.
El escritor lloró al conocer la sentencia y aseguró que, aunque ganó el juicio, su vida personal quedó completamente destruida
Bidognetti, el jefe mafioso, fue condenado a un año y medio de prisión, mientras que su abogado Santonastaso recibió una pena de un año y dos meses. Ambos fueron declarados culpables de amenazas agravadas con métodos mafiosos. Durante estos 17 años, Saviano ha tenido que soportar no solo las amenazas de la mafia, sino también las críticas de políticos de ultraderecha como Giorgia Meloni y Matteo Salvini. Este último, cuando era ministro del Interior, llegó a amenazar con retirarle la escolta, asegurando que su vida no corría peligro real.
Años de calvario
La sentencia demuestra exactamente lo contrario: las amenazas eran reales y los riesgos, tangibles. La Federación Nacional de la Prensa Italiana y el Colegio de Periodistas se personaron en el caso, destacando su importancia para defender la libertad de prensa. El autor ha confesado recientemente que intentó suicidarse hace años y que necesita medicación para dormir debido a la presión constante. «Si hubiera sabido a lo que me enfrentaba, no lo habría hecho», ha admitido en varias ocasiones.
Saviano ha revelado que intentó quitarse la vida y que vive medicado con ansiolíticos debido al estrés de las amenazas constantes
«16 años de proceso no son una victoria para nadie», concluyó el escritor, mostrando la amargura de quien ganó la batalla legal pero perdió su libertad personal. En un artículo publicado en ‘Il Corriere della Sera’, Saviano reconoció que esta sentencia es «la más importante de su vida».
El caso ilustra el precio que pueden pagar los periodistas y escritores que se atreven a desafiar al crimen organizado. Aunque la justicia ha tardado 17 años en reconocer las amenazas, la sentencia establece un precedente importante para proteger a quienes informan sobre actividades mafiosas.