Agosto en Málaga es sinónimo de Feria. Cuando llega el ecuador del mes, la capital de la Costa del Sol se pone sus mejores galas. Pero, ¿por qué es la fecha elegida para la Fiestas de la ciudad? El origen se remonta a 1487, con la incorporación de Málaga a la Corona de Castilla. La entrada de los Reyes Católicos a la ciudad se produjo el 19 de agosto del mencionado año, por lo que esta fecha del calendario es uno de los días festivos locales en la ciudad a muy pocas semanas de distancia de la otra festividad malagueña del 8 de septiembre con la Virgen de la Victoria. Además, llega también pocos días después del 15 de agosto, festivo nacional.
De este modo, la Feria de Málaga se basa en una fecha histórica que cambió el signo de la ciudad con la llegada de los Reyes Católicos, que se produjo cinco años antes de la conquista de Granada en 1492 marcando el fin del Reino Nazarí y de la presencia musulmana en la Península Ibérica.
La Real Cédula de la Feria, en 1489
Si en 1487 se produjo la Reconquista de Málaga, dos años más tarde (en 1489) se concedió a Málaga una feria mercado mediante Real Cédula, orígenes de la actual Feria que cinco siglo más tarde evidentemente ha sufrido alteraciones en su forma de celebrarse aunque mantiene esta fecha crucial en la historia de la ciudad como es el 19 de agosto. No obstante, hubo momentos en los que los días de Feria se vincularon a otras festividades religiosas como la Virgen del Carmen.
En el año 1489 es cuando se crea el primer Reglamento Municipal de Málaga, un documento que constituyó el primer conjunto de preceptos aplicados al ámbito municipal que reguló con carácter general todas las normas elementales para la reunión, asistencia, participación, deliberación y votación de los asuntos tratados por el concejo malagueño, tras su anexión a la corona castellana, siendo al mismo tiempo, un instrumento fundamental para la puesta en marcha del nuevo concejo y garantía para llevar a cabo la administración y buen gobierno de Málaga.