El funeral por el activista conservador Charlie Kirk, asesinado el pasado 10 de septiembre durante un debate en la Universidad de Utah Valley, se celebrará este domingo en Glendale (Arizona). El acto reunirá a algunos de los nombres más destacados de la política republicana, incluido el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Kirk, de 31 años, recibió un disparo en el cuello mientras intervenía en un encuentro universitario, un ataque que ha avivado la preocupación por la escalada de violencia política en el país.
Dónde y cuándo será el funeral
El servicio fúnebre tendrá lugar en el State Farm Stadium, con capacidad para 63.000 asistentes y sede de los Arizona Cardinals de la NFL. Según informó Turning Point USA, la organización fundada por Kirk, las entradas para el público general se distribuirán por orden de llegada.
También se habilitará un espacio de desbordamiento en el cercano Desert Diamond Arena, dada la expectación generada. Arizona era el estado donde Kirk residía junto a su esposa, Erika, y sus dos hijos, además de ser la sede de su movimiento político.
Aunque aún no ha sido designado como acontecimiento nacional de seguridad especial, el Servicio Secreto ya trabaja con las autoridades locales en un plan coordinado para garantizar la seguridad.
Quién asistirá
El presidente Trump interrumpirá su viaje oficial en el Reino Unido para asistir al funeral, donde pronunciará un discurso en memoria de Kirk. También hablarán su viuda, Erika Kirk, y el vicepresidente J.D. Vance, quien ha reconocido públicamente la influencia decisiva de Kirk en su carrera política.
Otros asistentes confirmados son el secretario de Estado Marco Rubio, la jefa de Gabinete de la Casa Blanca Susie Wiles y el secretario de Defensa Pete Hegseth.
En los últimos días, decenas de simpatizantes se han concentrado en un monumento improvisado frente a la sede de Turning Point USA en Phoenix, depositando flores, velas y banderas.
Las palabras de la viuda
En un emotivo mensaje transmitido en directo, Erika Kirk aseguró que la muerte de su marido ha encendido un «fuego» en ella. «Si antes pensaban que la misión de mi marido era poderosa, no tienen ni idea de lo que acaban de desatar», declaró.
La viuda prometió mantener vivo el legado político de Charlie Kirk y definió sus palabras como un «grito de guerra» que resonará dentro y fuera de Estados Unidos.
La investigación del asesinato
Las autoridades de Utah acusan a Tyler Robinson, de 22 años, de ser el autor del disparo. Fue detenido al día siguiente del ataque, a cientos de kilómetros de la escena. Los fiscales confirmaron esta semana que pedirán la pena de muerte, alegando pruebas como ADN en el arma homicida y mensajes de texto en los que Robinson habría confesado a su pareja.
Mientras tanto, el vicepresidente Vance pidió «unidad nacional» tras el crimen, aunque también instó a denunciar a quienes celebran el asesinato. «No creemos en la violencia política, pero sí en el civismo», declaró.
El funeral de este domingo se perfila como un acto de duelo colectivo pero también como un evento de enorme carga política, donde el conservadurismo estadounidense rendirá homenaje a uno de sus líderes más influyentes de la última década.
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