Los nueve bomberos del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) de la Diputación de Málaga han llegado a la frontera de Polonia con Ucrania, donde han entregado a sus compañeros ucranianos un total de 3.000 kilos de material técnico de emergencias.
La expedición partió de la sede central de la institución provincial el pasado viernes por la mañana, con el objetivo de ayudar a los bomberos ucranianos que, a pesar de la invasión rusa, siguen trabajando en unas condiciones muy duras.
La entrega se ha producido en un punto cercano a la frontera, junto a la ciudad polaca de Radymno. Entre el material técnico que han llevado se encuentra ropa técnica de abrigo y de extinción, material de rescate, linternas, cascos, tiendas de campaña, generadores eléctricos y motoventiladores, especialmente útiles para renovar el aire de las zonas de protección bajo tierra durante los bombardeos.
Ahora, los bomberos del CPB se trasladarán a otro punto de la frontera para afrontar su segundo objetivo: recoger a una decena de mujeres y niños refugiados y traerlos a Málaga, en colaboración con la asociación de ucranianos en la Costa del Sol Maydan. Si no surgen imprevistos, el regreso a Málaga está previsto para el 30 o 31 de marzo, han indicado desde la Diputación en un comunicado.
La Diputación activó en la primera semana de conflicto una comisión técnica junto a la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Málaga y el consulado de Ucrania para atender de manera urgente a las personas que estaban llegando.
Además, se está elaborando un mapa con los recursos disponibles en la provincia y se ha puesto en marcha un teléfono para atender a los ucranianos y una web para canalizar la ayuda de los ciudadanos que quieren ayudar.
Un total de 24 personas han sido acogidas en La Noria, el centro de innovación social de la Diputación. La institución provincial también está coordinando con los ayuntamientos de la provincia la ayuda y acogida a los refugiados ucranianos.