Un 22 de mayo de 1946 venía al mundo en Belfast una persona única, George Best. El mejor. El quinto Beatle. Probablemente, el futbolista que ha dejado a su paso un repertorio de frases y leyendas más florido. Pudo estar en ese podio con Pelé, Maradona, Cruyff… Y quien lo vio asegura que aquel número 7 no tenía nada que envidiar a los grandes astros del balompié. Genio y figura, el chico de Belfast falleció en 2005 debido a problemas con el alcohol. Un mito que estuvo a punto de militar en el Atlético Marbella, la ciudad que fue su refugio en uno de sus peores momentos vitales. Estaba roto y en una habitación del Skol ahogó sus penas.
En el 70 aniversario del nacimiento de Juanito, icono del fútbol malagueño
Corría el año 1972 y el extremo del Manchester encontró en la Costa del Sol el refugio dorado en el Hotel Skol. Allí se hizo amigo del camarero Juan. Su dieta matinal consistía en trasegar un par de claras de cervezas para sobrellevar la resaca de la noche anterior. Lo cuenta en sus memorias etílicas, publicadas en España por la Editorial Contra, ‘El mejor’.
Su refugio en el hotel Skol
La autobiografía de este enfant terrible relata su periplo por la provincia de Málaga. Del Skol, la siguiente parada era un bar cercano donde las cervezas iban acompañadas de unas tapas y de ahí iba a Puerto Banús a seguir con el vodka. Contaba Best que pensaba que dominaba el español en medio de esa ruta etílica, aunque ni siquiera lo chapurreaba.
Según la leyenda marbellí, el muchacho de Belfast e icono del Manchester United ya ajado por el paso del tiempo y las patadas fueras y terreno del juego, estuvo a punto de cambiar las playas de la Costa del Sol por el césped. Vicente Ruiz, presidente del extinto Atlético Marbella, dice que se presentó voluntario para militar en el equipo de la ciudad, aunque en aquella época no se permitía inscribir a extranjeros.
«Si hubiera nacido feo, ustedes no habrían oído hablar de Pelé», fue una de las frases míticas que dejó este artista del balón, un beatle de melenas y carpines bajados que 79 años después de su nacimiento cualquier futbolero que se precie sigue recordando. Lástima que a veces el tenerlo todo a favor, la belleza, el talento y la gracia pueda ser la peor de las suertes. El genio lo explicó muy bien: «Nací con un gran don y a veces eso viene con una racha destructiva».